Fiel a la esencia de la obra del escritor canario, Nela propone un análisis crítico sobre la vida en la España rural del siglo XIX, cuyos males continúan vigentes en parte en la sociedad española contemporánea.
Marianela, joven huérfana y de pobres atributos físicos, sirve de lazarillo de Pablo, joven ciego de cómoda posición social y buen porte, de quien se enamora.