´La púa de rastrillo´ reúne once cuentos que recorren la obra de Caterina Albert y termina con el monólogo dramático ´La infanticida´, su carta de presentación al público, vetado por el mismo jurado que lo había premiado al descubrirse que había sido escrito por una mujer. Este primer contacto la llevó a asumir el pseudónimo de Víctor Català para explorar la sombra con absoluta libertad y construir los destinos humanos, especialmente los femeninos, sobre el hilo de la violencia.